Tal y como adelantamos en la primera parte de esta Mini-Guía de Construcción con Adobe, no pretendemos establecer un texto científico que se deba tomar como un manual. Se trata de un texto basado en la experiencia y en el estudio y que define reglas básicas y principios fundamentales a seguir a la hora de enfrentarse a cualquier construcción con este material lleno de propiedades beneficiosas

En esta ocasión nos centramos en el proceso de fabricación de la materia prima con la que luego pasaremos a levantar nuestra casa, muro, barbacoa, cobertizo o lo que sea: los adobes

MINI-GUÍA DE CONSTRUCCIÓN CON ADOBE II

PROCESO DE FABRICACIÓN DE LOS ADOBES

Elección del suelo:

  • Proporción de limos y arcillas 25% al 45%
  • Máximo de arcilla del 15% al 17%
  • No se puede utilizar tierra de cultivo (con materia orgánica)

Tierra con materia orgánica: color negruzco
Tierra salitrosa: color blanquecino y sabor salado

  • La sal se acumula en la superficie y vuelve a cristalizar dañando ostensiblemente el adobe
  • El suelo para hacer adobes se encuentra en casi todas partes y es prácticamente ilimitado, pero unos suelos son mejores que otros aunque la mayoría de ellos se convierten en satisfactorios con una pequeña modificación (normalmente añadir arena)

 Ejercicios para determinar las características del suelo:

Test de la Jarra

Test de la Jarra

Test de la Jarra

  • Indica por sedimentación los diferente componentes, asentándose los más grandes abajo y en los primeros minutos y los más finos arriba, pudiendo necesitar más de 24 horas:
  • Grava, arena, limo y arcilla[2] se asentarán por este orden.
  • Se trata de un test orientativo

Test de la cuerda

  • Se lleva a cabo añadiendo el suficiente agua a un puñado de barro como para hacer una cuerda moldeable de 1’5 cm. de diámetro
  • Mediremos el extremo que se parta: entre 5 y 15 cm. = suelo adecuad0
  • Indica la plasticidad y la cantidad de arcilla

 Test de resistencia 

  • Se modela una pelota de 2-3 cm. de diámetro de la mezcla.
  • Se deja secar 24 horas para posteriormente presionar entre los dedos pulgar e índice
  • Si es óptima para hacer adobes no conseguiremos romperla

 

 Proporciones de la MASA:

  • Variarán ampliamente dependiendo del lugar en el que nos encontremos, pudiendo incluso encontrar suelos naturalmente adecuados para la fabricación de adobes.
  • La mayoría de suelos necesitarán de algún tipo de modificación.
  • Trataremos normalmente con suelos ricos en arcilla, más abundantes que los arenosos.
    • Para modificarlos usaremos arena o arena gruesa.
      • De no ser accesible podemos usar materiales de alta dureza como grava, perlite o piedras.
      • También podemos usar fibra vegetal como paja o animal como excrementos de ganado
    • Para modificar los suelos poco ricos en arcilla simplemente le añadiremos más arcilla
  • Para determinar la cantidad a añadir de arena o arcilla realizaremos adobes de prueba.
    • La cantidad más alta de arcilla aceptable para el adobe viene determinada por:
      • Tamaño apenas disminuye una vez seco
      • Grietas escasas
      • Añadiremos aditivos hasta que las grietas prácticamente desaparezcan y el adobe pase los tests de resistencia.
  • Si la construcción a acometer se encuentra expuesta o descubierta (un muro de separación entre fincas por ejemplo) deberemos llevar a cabo un PROCESO DE ESTABILIZACIÓN DEL ADOBE
    • Limitamos la capacidad de absorción del adobe mezclando la masa con cemento, una emulsión asfáltica o cal
    • Encarece bastante el producto final.
    • Sólo en muros exteriores

 

Moldeado:

  • La superficie donde se colocará la forma debe ser plana, uniforme y estar nivelada.
    • Pequeñas irregularidades pueden ser eliminadas añadiendo arena seca en el fondo del molde.
  • La densidad de la masa (más o menos líquida) vendrá determinada por el número de moldes disponibles y la producción diaria necesaria.
    • Más difícil mezclar una masa seca que húmeda
    • La calidad de los adobes viene determinada por su densidad. → Masa húmeda más recomendable.
    • Si disponemos de pocos moldes, la masa quedará lo suficientemente dura como para que el adobe se mantenga en pie al retirarla
  • La masa debe estar BIEN MEZCLADA Y SER UNIFORME
  • Deberemos tener extremo cuidado con los pedazos de arcilla que al humedecerse se coagulan, formando pegotes o piedras que se adhieren al fondo y dificultan el proceso de mezclado.

La Forma

Formas individuales para adobes; foto cedida por CasadeBarro Arraial D'Ajuda, 2010

Formas individuales para adobes
Foto cedida por CasadeBarro Arraial D’Ajuda, 2010

  • Es importante que la madera utilizada para la construcción de la/s forma/s sea noble y esté impermeabilizada.
  • Cuidado con las termitas y otros insectos. Es conveniente tratarla.
  • Antes de utilizarla por primera vez deberemos sumergirla en agua durante al menos 24 horas para que la madera ensanche y coja su forma definitiva
  • Nunca la dejaremos expuesta al sol durante periodos largos.
  • Dependiendo del nivel de espesor de la masa y de su humedad, lavaremos la forma cada 2 o 3 adobes para evitar que se queden pegotes de barro pegados que luego dificultarán la salida del molde.
  • Colocaremos asas a cada lado fuertemente asidas a los laterales de la forma. Para formas múltiples podemos simplemente utilizar el excedente de las maderas que conforman el largo del rectángul

Tamaño:

  • Lo ideal es que sean el doble de largos que de anchos y que su peso no exceda los 18 kilos.
  • Dependerá también del tipo de producción acometida y de las propiedades que queramos darle a la construcción (por ejemplo antisísmica)
  • En cuanto a la profundidad, algunos comentarios:
    • Un adobe muy profundo será más propenso a sufrir grietas o rajas internas debido a que hay más capacidad que llenar.
    • Cuanta más capacidad, más peso y por consiguiente mayor dificultad a la hora de transportarlo, manejarlo y almacenarlo.
    • Utilizaremos más masa a la hora de unirlos en la pared
    • Por tanto, la altura debería mantenerse siempre por debajo de los 10 cm.

Secado:

protegiendo los adobes de la lluvia y el sol. Foto cedida por CasadeBarro Arraial D'Ajuda

protegiendo los adobes de la lluvia y el sol.
Foto cedida por CasadeBarro Arraial D’Ajuda

  • La velocidad de secado está determinada por: temperatura, humedad, viento y grosor del adobe
    • Cuanto más fino y pequeño el ladrillo, menor será el tiempo de secado
    • En las primeras fases del secado los protegeremos de la exposición directa al sol, al viento extremo y a la lluvia, ya que en esta fase son muy vulnerables.
      • 3-4 días en verano a varias semanas en invierno
      • Los taparemos con un plástico impermeable.
        • Destapándolos si es posible para continuar el CURADO.
      • Cuando estén suficientemente curados los levantaremos colocándolos de lado para acelerar el secado.
  • Deberemos abrir canaletas para facilitar el drenaje y evitar la inundación del lugar de secado
  • Finalmente rasparemos con una paleta la arena de la base y los apilaremos en un lugar seco para que terminen allí el proceso de curado.
  • La congelación (heladas nocturnas en países de clima continental) dañará los adobes imposibilitando la acción de secado.

Almacenamiento:

forma correcta de almacenar los adobes una vez curados

forma correcta de almacenar los adobes una vez curados

  • Cuando el adobe esté suficientemente curado los trasladaremos con cuidado hacia el lugar elegido para el almacenamiento.
    • Deberá estar cubierto y protegida la superficie del agua estancada o las corrientes o regueros
    • Evitaremos colocarlos en horizontal por el exceso de presión
    • Tendremos cuidado de que no se condense mucho agua en el interior por el efecto de “sudado” del plástico protector


Niveles de Producción:

Con la ayuda de una pala, una azada, una carretilla y un molde es suficiente para producir adobes. Un equipo de tres personas puede llegar a producir de 300 a 400 adobes en un día de trabajoCon la ayuda de una hormigonera y más moldes podemos duplicar la producción

La maquinaria pesada nos permite llegar incluso hasta las 20.000 unidades diarias.

 

REFERENCIAS

  • [2] Tamaño de las partículas: grava más de 2.000 mm. ; arena gruesa 2.000-0.425mm. ; arena fina 0,425-0,075 ; limo 0,075-0,005mm ; arcilla menos de 0,005mm